


¿Qué es Deepfake?
Deepfake o Ultrafake es un acrónimo compuesto por las palabras fake (falso) y deep learning (aprendizaje profundo).
Se trata de una técnica de inteligencia artificial que permite editar vídeos falsos de personas aparentemente reales mediante el uso de algoritmos de aprendizaje no supervisado conocidos en español como RGAs (Red generativa antagónica) y vídeos o imágenes existentes.
El resultado final de esta técnica es un vídeo muy realista, aunque ficticio. Ejemplos destacados del uso de la técnica deepfake4 son dos escenas de la película Rogue One una historia de Star Wars (2016), en las que la princesa Leia aparece como una niña con el rostro de Carrie Fisher, aunque en realidad fue interpretada por la actriz noruega Ingvild Deila5.
Si deseas para ver los usos de ésta herramienta te enseñamos una página donde crear personas que nunca han existido. Todas las imágenes de las personas de arriba jamás han existido, esas imágenes son creadas por un algoritmo de IA.
Esta técnica de modelado de RGAs se hizo popular mediante la creación de contenidos falsos en los que un actor o personalidad del espectáculo aparecía realizando actos sexuales en un vídeo pornográfico.
En este tipo de vídeos falsos, se crean combinando un vídeo pornográfico (que se utiliza como referencia para el algoritmo) y otro vídeo o imagen del actor o personaje, que es procesado por el software utilizando técnicas de deepfake.
No importa que el actor o el personaje nunca hayan mostrado escenas o vídeos pornográficos, pero el objetivo es crear la impresión más realista posible de que algo así ha sucedido. Debido a la abundancia de contenidos pornográficos en Internet, los vídeos deepfake se utilizan para crear falsificaciones pornográficas de famosos, pero también para falsificar noticias y crear bulos maliciosos.
Esta tecnología emergente se originó en la investigación y está encontrando aplicación práctica en el mundo del cine como alternativa a los procesos de construcción digital, que suelen ser caros. Quizá el ejemplo más famoso del uso de esta tecnología en el cine sea la última película de la saga de La Guerra de las Galaxias. Dado que la actriz Carrie Fisher, conocida por su papel de la princesa Leia, había fallecido durante el rodaje, hubo que utilizar esta tecnología para las escenas que quedaban por rodar. Gracias a los algoritmos RGA, es posible crear fotos que parecen auténticas para el espectador humano. Por ejemplo, una foto sintética de un gato que engaña al discriminador (una de las funciones del algoritmo) es probable que sea aceptada como una foto real por un humano normal.
Historia de los DeepFake o Fakeapp
Tradicionalmente, los fakes audiovisuales, posteriormente llamados deepfakes, eran obras que intentaban engañar a través de estímulos visuales y auditivos, como ocurría en el cine, en la televisión y en Internet.
En inglés, también se les llamó mockumentaries, que utilizan técnicas y códigos propios de los documentales para dar al espectador la impresión de que la historia que se cuenta es verdadera, aunque los autores siempre señalan que el contenido es falso. Un ejemplo de ello es el programa de radio “La guerra de los mundos“, dirigido y narrado por Orson Welles en 1938.
Este episodio sembró el pánico entre millones de estadounidenses que creyeron que la adaptación radiofónica de la novela de Herbert George, que afirmaba que se estaba produciendo una invasión extraterrestre de la Tierra, era cierta, a pesar de que varias advertencias habían señalado que se trataba de una narración ficticia.
Así que se puede ver que los deepfakes habían empezado a crearse de alguna manera hace muchos años, antes del episodio de reddit de 2017. Un ejemplo aún más primitivo que los anteriores es el del retrato del presidente de los Estados Unidos, Abraham Lincoln, de 1865, en el que se superpuso el rostro del presidente sobre la cabeza de un grabado más antiguo en el que aparecía John C. Calhoun apoyado en un escritorio en una habitación alicatada, un grabado de A.H. Ritchie de 1852. 78 Por último, cabe mencionar también el momento histórico en el que el explorador y médico estadounidense Frederick Cook presentó públicamente una serie de pruebas audiovisuales (archivos de sonido y fotografías) en las que afirmaba haber llegado al Polo Norte en 1908, lo que no era cierto.
Afortunadamente, el bulo fue desmentido al cabo de unos años. A través de esta constante manipulación, que no ha dejado de producirse durante décadas, el término “falso documental” se ha refutado a sí mismo. Así lo explica Vicente Díaz Gandasegui:
“El término ‘falso documental’ contiene una contradicción en los términos, ya que el adjetivo ‘falso’ precede al término ‘documental’, que se refiere al material que pretende reflejar la realidad. Realidad y falsedad son términos tradicionalmente presentados como opuestos en nuestra cultura, pero sin embargo el desarrollo de tecnologías capaces de replicar la realidad con absoluta fidelidad ha propiciado la aparición de estos espacios intermedios e híbridos que combinan realidad e irrealidad”.
Finalmente, en 1997, surgió lo que podría llamarse el precursor más cercano a lo que hoy se conoce como Deepfake. Se trata del programa “Video Rewrite“, que por primera vez consiguió alterar las imágenes de un vídeo en el que hablaba una persona para que dijera palabras distintas, reproducidas por una banda sonora diferente. Este programa fue el primer sistema que utilizó técnicas de aprendizaje automático por ordenador para establecer conexiones entre los sonidos producidos por la persona en el vídeo y la forma de su rostro.